365.

No digo que estuve esperando este día, pero si lo tuve presente en este último tiempo más que nada. Y tampoco sé como tendría que sentirme, que tendría que hacer, donde tendría que estar, que decir, nada. es muy confuso esto. Pero una de las cosas que tengo más presentes en este momento es ese 18.08.2011, y más aún, el entierro, el día después a ese. hace 366 días, cuando mi abuela me dejó en la casa de donniz para que vayamos al colegio y me dijo "esta tarde no voy a estar, me voy a cuidar a tu mamá". 7.30 ya estaba en el colegio, y tenía una sensación rara, pero seguí, porque tenía historia con Barri y era la gloria eso para mi, un poco más se hacía mi materia favorita con esa profesora. Igual, estaba medio en la luna, no sabía por qué. 8.45 tocó el timbre para el recreo y bajé a 3°D, como acostumbraba hacer, estuve un rato con los chicos, después fui con Melii y al final bajé al patio. A las 9 tocó el timbre y Ana me dice que mi papá estaba esperándome, que vaya a preparar el bolso así me iba para mi casa, entonces lo agarré a Adolfo y le pregunté si era verdad, y me dijo que si. yo no entendía nada, así que subí, guarde todo y bajé. En el camino mateo y gigi me preguntaron por qué me iba y les dije que no sabía, pero a los dos se les notaba preocupados, o quizas era yo que sentía que todos estaban así, no sé. En fin, llegué abajo y estaba mi papá. No sabía lo que me esperaba, intentaba evitar ese pensamiento porque quería que no fuera real, pero cuando abrí la boca no pude evitarlo "hola pa, que pasó?" le pregunté, medio feliz porque me estaba yendo del colegio. El estaba triste, igualmente evité ese pensamiento, lo aislé de mi cabeza, pero no podía seguir siendo así por mucho tiempo, la realidad me atacaba. "mamá.. se fue". y permanecí cinco minutos callada. Mi mamá? como puede ser? no, era imposible. Ella, que era la persona más fuerte de todas, la más alegre, la que más amaba vivir, la que se iba y volvía a cada rato. No, no podía ser, no quería creerlo. Entonces pregunté "qué?" "vos viste que ella estaba mal, enferma, no pudo más" y se largó a llorar y a abrazarme. "si, pero no sabía que era para tanto" dije lagrimeando, y así fue que me puse a llorar. y no paré durante diez minutos, en los cuales mientras apareció Lobos y la directora, y me abrazaban las dos mientras yo lloraba. Cuando paré me di cuenta que estaba abrazando a mi tutora y la solté un poco, pero ella estaba con los ojos cristalizados, también. Me dieron su pésame y me fui. Me subí al auto donde estaba mi tío que me llevó hasta mi casa. Lloré todo el viaje, no podría creer que estaba pasando por eso, ni me acuerdo lo que estaba pensando en ese momento, pero si recuerdo la angustia que sentía, era indescriptible. 
Llegar a mi casa fue peor todavía: estaba mi abuela, mis tíos, mis hermanos, la mejor amiga de mi vieja con su familia y sus hijos, mi tía, todos lloraban. mi tía, la hermana de mi abuela, me decía "nosotros te vamos a cuidar siempre, no les va a faltar nada" y mi abuela lloraba, era la primera vez que la veía llorar. lo que más recuerdo de ese momento fue cuando mi hermano me abrazó. Nunca me había abrazado, o no que yo me acuerde, sentí mucha angustia de su parte así que seguí abrazándolo. y después vino mi hermana, que estaba mal también. No sabía que hacer con ellos, sentía que estaban más perdidos que yo y me mataba no poder hacer nada. apenas entré a mi casa, ya quería salir y pedí que me dejaran ir a caminar, pero no querían que vaya sola, debían tener miedo de que me mate o algo así, no sé, sentí que no confiaban en mi, pero después de un tiempo entendí que yo hubiera pensado lo mismo. así que mi tía me acompañó, se puso unos anteojos de sol y salimos a caminar. Me empezó a hablar de mi mamá, de que ella había hablado un montón con ella y nose de todo. en el medio me llamó Melii porque se lo había pedido y le dije "ya está, se terminó todo, es mi mamá" y ella estaba llorando. Por qué lloraba? No le pregunté, estaba muy mal yo. Corté y seguí hablando con mi tía, mientras ella lloraba. yo era un mártir, no quería saber nada de la vida. Volví a mi casa y subí con mi tía y mi abuela, me prepararon un té de tilo para calmarme, pero no me hizo una mierda. mientras recibía mensajes de mis amigos, lo que me bancaron ese día y el resto de los días no tiene nombre. Después me enteré que mi directora había ido a hablar al curso y a contarles a todo, lo que me enojé en ese momento es indescriptible, no quería que nadie lo sepa por otra persona que no sea yo, pero entendí después que era obligación del colegio. A las 10.20 llamé a mi mejor amiga y le pedí que viniera después del colegio, y no veía la hora de que sean la 1 así me caían en mi casa. Temprano cayó mi primo, estaba destrozado, creo que nunca lo había visto tan mal. Hablar con él siempre fue super satisfactorio para mí, siempre me decía lo que quería escuchar pero explicitamente me decía lo que tenía que hacer. En fin, a la 1 cuando me tocaron el timbre bajé corriendo, estaban Nati, Cati, Meli, Agos, Julia, Agus, Gigi, Mateo, Donniz, Luli.. se quedaron conmigo hasta la hora que podían, y más tarde me cayeron Melii y Teffo (que no había ido al colegio) todos con comidas distintas, chocolates, pizzas, hamburguesas, intentando subirme el ánimo. Apenas bajé fui rotando de brazo en brazo, porque todos me estaban abrazando. nunca enfrenté una situación, osea ver a un amigo que perdía a un familiar sin haber enfrentado yo la muerte de mi mamá primero. Mi primo en un momento fue a mc y me trajo una doble cuarto de libra, y a mis amigos papas, gaseosas y chocolates. lo mejor. Nada, les pedí que me hablaran de su día, de boludeces, que me cuenten como había estado todo así me distraían, y pudieron hacerlo, de hecho me reía, sonreía, todo.. hasta que llegó mi papá, con cara larga, triste, con unos amigos de él, que venía de buscar el cuerpo de mi mamá y estaban preparando todo para el velatorio: yo quería ir, y mis amigos querían acompañarme, así que fui a preguntarle a mi papá si podían venir y me dijo que si, obvio. Eran tipo 4 cuando pasó todo esto, y yo me quedé con nati, melii y teffi mientras comía, mientras veía como intentaban subirme el ánimo, inclusive me daban ropa. empecé a prepararme. que me tenía que poner? negro? gris? blanco? rosa? no sabía, no tenía idea, así que me calcé un jean, una remera, una camisa y un buzo de tefo que me encantaba y me lo había prestado. Salí de mi casa con ellas y nos tomamos el 126 hasta av la plata y directorio, donde quedaba el velatorio, en el camino dije "jamás pensé que estaría yendo a este lugar". Llegar fue la sensación más rara del mundo, ver a mi mamá así tan muerta me mataba por dentro. La tocaba, veía como mi mejor amiga, que estaba atras mío, lloraba. y yo no. Experimenté mucho ese día y al siguiente esa sensación: de ver como mis amigos lloraban y yo estaba ahí, viendo el cuerpo de mi vieja, sonriéndole inclusive, y más tarde cuando se acercaban mis amigas yo las abrazaba para tratar de consolarlas. Realmente eso en cierto punto me jodió, porque por más que mi mamá haya sido compañera de todos, porque eso era, la conocía todo mi curso, la que había perdido a la madre era yo, no ellas, y sin embargo mucha parte de mi tarde se basó en consolar a mis amigas. En fin, más tarde fueron cati y agos, meli, edgar, tom, rober, vicki, meli, nico.. un montón, eran como 20, me sentía feliz de que estuvieran ahí bancandome, inclusive en un momento me puse a cantar. La gente me miraba con cara de "que?" pero bueno, a mi me hacía feliz de que mis amigos estuvieran ahí, aunque me hubiera gustado que una o dos personas que no estuvieron hubieran ido, estaba bien, porque me apoyaron desde otro lado y agradezco un montón todo. Los que fueron llevaron flores, entraban conmigo donde estaba el cuerpo de mi mamá, lloraban conmigo, me abrazaban, hacían que me olvide de todo. Realmente es algo que les agradezco de por vida, a los que fueron al velatorio y a los que no pero me hicieron la gamba desde el otro lado. Fue horrible, tremendo ver a mi mamá así, vestida de blanco y llena de flores, sin poder levantarse, y se iba enfriando de a poco, pero cuando me hacía muy mal salía a las escaleras, donde mis amigos estaban esperando para hacerme la gamba. Si, varios momentos me largaba a llorar desesperadamente, abrazaba a todos los que estaban a mi alcance, les decía cosas de mi mamá, de como era y como se había ido. nose, decía de todo, tenía una angustia, un vacío y una desesperación increible ahora que recuerdo. Por más que diga que ya pasó, que ya lo afronté, cada vez que me acuerdo de lo que pasé pienso que no podría pasarlo otra vez, porque JURO que es demasiado dolor y angustia juntas, por más que haya tenido millones de hombros y de oidos para bancarme es algo que no se puede vivir dos veces, y menos con alguien tan cercano, no creo ser tan fuerte. A lo largo del día seguía recibiendo mensajes, llamadas, y yo respondía sin ganas, juro que tenía ganas de tirar el celular a la mierda. me agarraban de la mano, me abrazaban, me hablaban de boludeces, puteaban, me cantaban, de todo, hicieron de todo para verme bien, para hacerme sentir que la vida continuaba. Ya a eso de las 11 se habían ido todos, excepto nico que se quedó hasta que yo me fui. crucé a comer algo a la estación de servicio con mi viejo, pero no pude comer nada, tenía el estómago cerrado, me dolía, quería vomitar pero a la vez comer, nose que sentía, solo angustia. Cuando mi viejo terminó de comer, que había ido también con unos amigos, volvimos a cruzar al velatorio y en el camino me decía "nos queda una larga vida sin mamá" "no pensemos en eso ahora, por favor" le dije. que pensó que me iba a causar con eso? ya lo sabía imbécil, no tenías por que repetirmelo. No quería más estar ahí. osea, si, quería acostarme con mi mamá y quedarme ahí hasta el fin de los tiempos, que me abarce y sentir que no iba a estar sola nunca más, porque eso había sentido esos últimos dos meses que ella estuvo yendo y viniendo del hospital: que estaba sola, así que agarré y me vine para mi casa, no quería abrir el fb, sabía que había muchas personas que me habían firmado y no tenía ánimos para decir nada, así que abrí el msn y me quedé como desconectada, hasta que me llegó un mensaje de tefi para que me conecte y  eso hice. hablé un ratito con ella y después me quedé hablando con mateo toda la noche. me hizo un montón la gamba, lo que le agradezco hoy en día por mantenerme distraída en esas horas juro que no tiene nombre, porque no solo me bancó esa noche mientras lloraba e intentaba distraerme con cualquier cosa, mostrandome cosas o hablandome de cualquiera, sino que el resto de los días a partir de ese intentó distraerme, hacer que me olvide de todo eso, por parte también porque el lo había pasado con alguien muy cercano a él también. no sé, todos me bancaron increiblemente, algunos más que otros. Esa noche le hice una cartita a mi mamá, ya ni me acuerdo que le puse, pero le hablé con el corazón, con la angustia. al otro día fui y le saqué fotocopia a esa carta y a una foto, la metí en un sobre y se lo puse en las manos así la iba a tener por siempre. Dormirme esa noche fue todo un desafío, osea ya venía con problemas para dormir desde antes, porque a veces me quedaba despierta a la noche por mi mamá, para que se despierte y si necesitaba algo yo me levantaba a darselo porque no podía caminar, o si quería ir al baño tenía que acompañarla, aparte dormía intranquila. Pero esa noche soñé que aparecía en el cuarto así como estaba en el ataúd: toda blanca, con una túnica blanca, enferma.. fue horrible. no, no fue lindo por soñarla, fue horrible por lo que soñé, dormí para el orto esa noche. Al otro día que no fui al colegio, me levanté temprano, me cambié, no me acuerdo en qué momento me bañé o si me bañé inclusive, me cambié, me arreglé, salí sonriendo de mi casa. Por qué sonreía? iba al velatorio de mi mamá, a verla por última vez en toda mi vida. no más fotos, no mas peleas, no más risas, no más salidas, no más "che ma..." no, nada más, era nuestro final. Pero sin embargo ahí estaba yo, sonriendo macabramente, siempre tan particular yo. Llegué y estaba toda mi familia. tenía los labios paspados, así que me fui a la farmacia de en frente a comprar manteca de cacao. Volví y estaban mis primos, mis tíos, nose toda mi familia, y amigos de mi mamá también. El 19 ya estaba más fría, y eso me desesperó más, pero a la vez estaba tranquila (no hace falta aclarar que afronté la situación de una manera esperable pero a la vez rara). Cuando dieron la orden de que nos vayamos despidiendo, no quería irme, no quería despedirme, no quería saber que la estaba dejando para siempre, pero igualmente me agaché, le di un beso y salí corriendo a las escaleras a llorar. no aguantaba más esa angustia, esa soledad que me iba a atacar el resto de mis días. Cinco minutos llorando, guardé las lágrimas y volví, no quería demostrar esa debilidad. Entré, todos estaban llorando, yo seguía sin llorar, odio llorar cuando todos lloran, prefiero llorar cuando nadie llora, me hace mejor. Me metí en el remis principal, donde llevaban a los familiares más cercanos a chacarita con mi viejo y no me acuerdo con quién más, todo me daba igual en ese momento. Fuimos a la iglesia, unas palabras de el hombre ese y fuimos al lugar donde la iban a enterrar. El entierro de mi mamá fue peor, porque estaba sola, mis amigos cayeron más tarde porque estaban en el colegi. Igual no lloré, todos lloraban y gritaban, mis abuelos pedían a gritos que vuelva, que no la entierren, y yo miraba, observaba como bajaban el ataúd hacia ese hueco, le hechaban tierra y le ponían las flores arriba, una mirada hacia atras de la fila de en frente y estaba mi otro primo, llorando. a cuantas personas había visto llorar ese día y el anterior por primera vez? un montón; esas cosas me hicieron dar cuenta de la gravedad del tema, obvio que después con el pasar de los días me di cuenta yo solita lo duro que es afrontar la vida desde tan joven sin mamá, pero en ese momento no andaba pensando en eso, realmente no sé en que pensaba. ya dije, soy rara ante estas situaciones. Pero ver a mi primo así me mató, de hecho me mató ver así a toda mi familia. a veces cuando antes me agarraban esas locuras de decir "si me mato me voy con mi vieja" pensaba en el llanto de todas esas personas y del dolor inmenso que sentí yo y frenaba, no es algo que se pueda afrontar dos veces, no en un lapso tan corto de tiempo. Cuando terminó todo eso, todos estaban llorando y mostraban angustia, pero yo miraba, sin entender exactamente que tenía que sentir, pero definitivamente no me bancaba a nadie de mi familia, quería fusilarlos a todos. yo sentía que mi vida seguía pero a la vez quedaba atascada en ese momento, y ellos solamente estaban empecinados en llorar. NO LLOREN IMBECILES, mi vieja no hubiera querido eso. tenía mucha bronca. Después, me senté, quería hablarle tranquila pero mi abuelo estaba llorando atras mío, así que le dije "las lágrimas a otro lado, quiero estar tranquila con mi mamá" que poco tacto tuve al decir eso, pero la verdad es que no aguantaba más las lágrimas de nadie, ni las mías. Era el día más frío del año, lo juro, y yo ya me había puesto a llorar. lloraba en la tumba, mientras todos se iban. creo que le dije algo de que nunca la iba a decepcionar, o que no era lo que quería, que me guíe, que me haga sentir que existía algo después de la muerte, y es el día de hoy que sigo intentando creer que ese algo existe. 
Después, cayeron mis amigos, traían una flor cada uno, me sorprendió un montón verlos, me hizo muy feliz verlos ahí, como se acercaban, todos bordos por los uniformes y cansados por las materias de mierda que tenían ese día. Yo seguía agachada, sentada enfrente de donde la habían enterrado, y se pusieron a llorar, de vuelta fer a consolar, cuando tendría que haber sido al revez. Igual, en ese momento no me importó, realmente quería sentir que a pesar de como estaba podía hacer algo por los demas. Que irónico, no? Ese día me hice más fuerte, estoy segura. 


Pude sobrevivir a eso, pude, aunque al principio lo creía imposible. Es el día de hoy que mi hice tan fuerte ante este tema, lo traté con tanta indiferencia que no lloro, me cuesta un montón, o quizas tampoco quiero llorar, siento que no me permite avanzar, pero aprendí a convivir con el dolor. Aprendí a convivir con el dolor de no tener a mi mamá, de extrañarla en todo momento, de llorarla internamente, de ver como todas mis amigas les cuentan sus cosas a sus madres y yo estoy ahí, no sola pero sin ese ejemplo a seguir que todas tienen. Obvio, esta mi abuela y mi tía, que les agradezco eternamente todo lo que hacen día a día por mi, y a mi tío también. 
Aprendí, y si aprendí eso puedo aprender a todo, o casi todo. Si pude inhabilitar esa parte de mi corazón creo que puedo hacerme fría ante todo, aunque realmente no quiero.


Son pocas las personas que tengo fijas desde hace un año o más (refiriendome a amigos o compañeros), pocas las que les decía que estaba mal y me levantaban el ánimo de cualquier manera, pocas las que tienen todo mi respeto y todo mi amor pase lo que pase, y menos aún las que por más que me vean sonriendo, saben que por adentro me estoy muriendo. Así que por eso les estoy eternamente agradecida, lo juro. y ni tengo que nombrarlas, porque doy por sentado que a saben quienes son. 

De todas formas, el estar indiferente siempre, nunca es bueno. Porque yo a mi mamá la extaño como a nadie, y el dolor que se siente es indescriptible, y sé que si ella me ve, lo sabe, y también lo saben esas pocas personas que me ven sonriendo y saben que estoy angustiada por todo, no solo porque no la tengo, sino por lo que la vida me dio para vivir. Aparte, entendí que lo último que tengo que sentir es soledad, porque sola no voy a estar nunca, a pesar del caracter de mierda que tengo, no estoy sola, ni hoy ni nunca. 
Y doy gracias a la vida por eso, por la familia y los amigos que me tocaron, que son lo más valioso que tengo, son de oro.