Integridad

Tuvo como profesor a su ángel de la guarda que le enseño que un fracaso no siempre es perder. ella lo aprendió, lo masticó y por fin supo reir

18 may 2015

how will I know?

Cómo vamos a saber en determinado tiempo de nuestras vidas las consecuencias de nuestras decisiones? cómo comprendemos la magnitud de lo que estamos eligiendo, o más bien, a lo que nos estamos negando? esas decisiones que en su momento parecen tan correctas que con el correr de los días, los años, determinó tu vida entera. No una decisión, un conjunto de decisiones. Elegir estudiar un día menos, decidir si cruzar la calle corriendo o esperar a que el semáforo cambie, si me tomo este taxi o espero el de atrás, si corro el subte o espero el que viene, si elijo estudiar psicología o abogacía, si tengo un hijo ahora o espero un tiempo más, si este año me dedico al trabajo o al estudio.. todas y cada una de esas decisiones, por más insignificantes que parezcan nos determinan la vida, determinan lo que vamos a ser en un futuro (por más lejano que parezca). No podemos asegurar que cierta decisión es correcta o es lo mejor para uno, por más que en el momento así lo parezca, en un futuro puede ser lo contrario y arrepentirnos de dichas decisiones. Pero, cómo somos capaces de advertir eso que está por venir? Disfrutar el hoy y preocuparnos por nuestro futuro son dos caminos completamente distintos.
Cómo voy a saber, por ejemplo, si voy a querer a mis hijos, si formar una familia es lo mío, hasta que no estás en ese terreno y lo comprendes? Cuánto más triste podes ser si te das cuenta que eso que siempre estuviste segura que te hacía feliz hoy es tu mayor insomnio? Cómo te escabullis de esa situación?
no sabes en qué momento esa/s decisión(es) que tomaste con tanta certeza se volvieron en tu contra, qué interuptor tocaste para que todo se diera vuelta y hoy todo es de la manera que menos te lo esperaste, porque ese pedacito (todo tuyo) que tan feliz te hacía y que tanto creció hasta ser un pedazo muy grande, hoy seguís ansiando que siga haciéndote sentir así, pero ya no lo hace más. Porque lo perdiste, porque lo gastaste o lo cansaste, porque le pusiste tanta esperanza que se acabó (no lo sabes, supones). Pero siempre pensaste (aún lo haces) que ese pedacito vale la pena, y siempre queres averiguar el momento del interruptor. Siempre lo llamaste "pedacito" no por su tamaño, porque de hecho era grande, sino por su fragilidad. Porque era grande y débil a la vez, porque era muy importante. Siempre esperas que ese pedacito vuelva, siempre le tenes esperanza. (es ahí dónde te equivocas).
Hoy, por más que estés segura de la vida que estas llevando, en algun momento va a volverse patas arriba, en algún momento todo va a cambiar y va a ser consecuencia de las decisiones que tomes hoy. De las oportunidades que des y que no, de tu manera de aprovechar el tiempo, va a depender de en lo que decidas hoy depositar tus energías y en lo que decidas proyectar, de la actitud que tomes ante las consecuencias de tus malas decisiones y acciones. Porque también la manera de actuar te determina, determina lo que sos y de la manera que la gente se va a acordar de vos.

Que complicadas son las decisiones. El subte o el bondi, el taxi o el remis, el trabajo o el estudio... qué me conviene hoy y también me va a convenir en un futuro? Cómo sé que no me estoy equivocando? Entregate, sé feliz, sé pacífico y confia. Decí que sí, equivocate mil veces y seguí dando oportunidades, porque después, al fin y al cabo, si decís "no" te quedas con una duda que te consume y te hace dudar de tu existencia, de tu presente y si estás tomando las decisiones correctas para tu futuro.
Qué complejo elegir, determinar, sin saber cómo va a repercutir, sin tener la más mínima certeza de algo. Si seguir luchando es de tontos o es de valientes, si es una prueba para ver hasta dónde puedo llegar por lo que quiero o es algo que Dios me está sacando por mi propio bien. confía, porque él sabe.

Hasta dónde estás dispuesto a llegar por eso que tanto queres HOY pero no sabes de mañana? Yo creo que la respuesta está en no soltar eso que queres hoy, porque si hoy lo queres y lo cuidas probablemente mañana también. Y mañana esté nutrido de ese amor, confianza y afecto que le diste ayer. Y, probablemente, mañana lo sigas queriendo. Sabes por qué? Porque tiene muchas cosas malas, pero tiene muchas cosas buenas.. y sus cosas buenas hacen que valga la pena.

30 abr 2015

Es sabido que cuando uno siente que las cosas no pueden ser mejor o que por lo menos está viviendo un estúpido y frágil equilibrio vital, las mismas tienden a desmoronarse casi instantáneamente. Es así, una regla vital, una estúpida consecuencia de la conciencia. Porque quizás uno al pensarlo se está llenando de miedo la vida y se está abriendo al mismo tiempo a las malas vibras. Tengo la alucinación de que cuando uno es ignorante de su propia felicidad, puede conservarla mucho más tiempo y en mejor estado.

31 mar 2015

scandal

-I could probably be normal. I could. But I don't want to. I'm not built for it. I don't want normal, and easy, and simple. I want painful, difficult, devastating, life-changing, extraordinary love. Don't you want that, too?

- Love is not supposed to be painful or devastating. Love isn't supposed to hurt.

18 mar 2015

soul

No era una cuestión de necesidad, nunca lo fue. Una parte de ella sí, porque después de un tiempo te acostumbras y necesitas esa costumbre.. pero no lo necesitaba, simplemente lo quería. Tenía (quería creer) una vida ocupada, haciendo cosas, ayudando a los demás, estudiando, laburando... había seguido su camino, o al menos eso creía. Podía estar bien. Podía pasar un día sin llorar, siempre recordándolo pero sin lágrimas, su ser se había deshidratado (otra vez). Él también tomó otro rumbo en su vida, sin ella, un rumbo en el cual ella no era parte de su vida ni planeaba serlo.. y eso le dolía en su ser. Porque siempre albergaba en ella la esperanza de estar, de volver a sentir sus manos entrelazadas, sus besos y abrazos cálidos, su cuerpo.. cómo es que tanto bien hace tan mal?.
Pero no se necesitaban. Cada uno tenía una rutina. Todos los días distintos, todos los días iguales. Salían con sus amigos, iban a fiestas, se veían con otras personas y sentían un vacío.. pero dicen que es normal, no se preocupaban, eso ya iba a pasar. Tenían otras compañías, compañías de unas horas, de una noche, o amigos, familia, compañeros. Tenían facultad. Tenían vida. No se necesitaban. No creían necesitarse. Excepto cuando Buenos Aires se iba a dormir, poco a poco, persona por persona.. sus compañías se iban con otras compañías, sus amigos con otros amigos.. y ellos se quedaban tumbados en la cama, a veces durmiéndose enseguida por el cansancio y a veces pensando en qué se convertiría su soledad con su antiguo compañero, extrañaban esa certeza de irse a dormir sabiendo que al otro día iban a hablarse (si no era verse) y contarse sus días, sus frustraciones, sus enojos y alegrías..
Pero creyendo que podían, esas dos almas siguieron separadas, esperando que su alma compañera fuera en su busca, en la dulce espera de extrañarse un poco menos..

13 mar 2015

desde el dolor.

No puedo más estar triste. No lo soporto. Pensé que había terminado con todo ese tema de la tristeza ahogante, del sinsentido de la vida, pensé que había encontrado a alguien para estar para siempre. También pensé que alejarme iba a ser lo mejor, porque somos dinamita, porque explotamos a la par y nos hacemos mierda.. pero me hago más mierda lejos suyo, lejos de sus brazos, de sus besos, de sus caricias y sus mimos, lejos de él. No estoy segura de que haya algo mejor para mí ahí afuera, no creo que exista costumbre tan linda, cómoda y maravillosa como hablar con él todos los días, como vernos, como estar juntos. Nada de lo que viví con él siento que lo voy a poder pasar con alguien más, no quiero no puedo. No voy a estar nunca cómoda.

Un viaje maravilloso que recorrimos, que por momentos pensé que no iba a tener fin y por otros sentí que se explotaba en el momento.. fui tan feliz aunque a veces no lo pude ver, me cegaba el enojo, la bronca a veces. Fue todo hermoso y hubiera querido estirarlo para toda la vida, porque todo de él valía la pena para mí, cada cosa que soportar, cada situación en la que tenía que tener paciencia.. él lo valía. Hoy me despido amando pero queriendo creer que en algún momento, de alguna manera, voy a ser feliz.